poema por
Óscar Marchesin
Quedaron dos gajos de naranja mirándose
mientras el plato vacío los abrazaba
el sol descendía convertido en rayos de sal
y un pájaro multicolor contaba los minutos que
perseguidos por la ternura, pasaban
Dijeron que estaban allí desde el antes
inmediatamente anterior al pasado, más pasado
pero había un claro error de cálculo:
nunca habían venido y jamás se encontraron
Es entonces cuando, en los ojos de la duda beben
agua mineral fosilizada, a grandes sorbos y hambrientos
con la mirada perdida y las caras pálidas
Contado así tan en tercera persona, tan lejano
Capturar las palabras calladas, desistir sin renunciar
entenderte sin que hables
burbujas de brisa con raíces que crecen en el aire
—¿Sabes?, soñé que no quiero despertarme
mientras tu duermas a mi lado
El goteo de un grifo que se calla al acercarme
la heladera que ronronea, la luz del patio
la tarta de manzana y esa luciérnaga que desde el impropio
nos espía cada vez que nos desnudamos
Asomado a la ventana de lo incierto me doy cuenta:
hace un hoy de espesuras no exentas de fragancia
quizás sean los geranios, la manguera del agua no puede ser
está conectada al aspersor para que llueva
sobre el césped de nuestras esperanzas
¿Sabes?, esperé cuando no llegabas, desesperado
mañana amaneceré temprano
quiero robar una piedra blanca para vos
encontrarla entre miles de otras piedras blancas
¿Sabes?, crece un niño en el jardín, del tallo de un rosal
mientras hablamos, pero él aún no lo sabe
Ducharme, enjabonarme de ti aunque mañana sea sábado
mentirle a las sábanas y convencerlas de que nadie
antes de ahora, compartió con ellas esta almohada
¿Sabes?, tengo hambre
Quedan dos gajos de naranja mirándome
mientras el vacío me abraza
los rayos de sol saben amargos y un pájaro negro
cuenta los minutos que perseguidos por la prisa, pasan
Estabas aquí pero hubo un claro error de cálculo:
nunca habías venido ni tampoco tuvimos tiempo
de encontrarnos
Es entonces cuando en los ojos de la certeza
bebo agua mineral fosilizada a grandes sorbos y hambriento
con la mirada perdida y la cara pálida
Contado así es tan mágico, aunque mañana sea sábado…
🔸 🔹 🔸 🔹
ÓSCAR ALBERTO MARCHESIN POLINELLI. Poeta nacido en Buenos Aires. Colaborador de revistas literarias en América, España y Holanda. Cofundador de varias revistas literarias. Colaborador en SADE en talleres literarios y presentaciones. Publicó algunos libros en alguna época. Vive en Montevideo desde 1998.
📩 Contactar con el autor: facebook.com/vivir.leer.escribir/
👁 Leer otros poemas de este autor: La isla colorada
🖼 Ilustración poema: Fotografía por PublicDomainPictures / Pixabay
Revista Almiar – n.º 103 / marzo-abril de 2019 – MARGEN CERO™
Comentarios recientes