relato por
Amador Redondo Menudo

 

S

u mano estaba cubierta de una especie de gelatina traslúcida. Me tocó el rostro, y le sonreí.

—No tiene que preocuparse de nada —dijo, y se sentó junto a mí—. ¿Quiere continuar?

Así lo hice.

—Recuerdo a mis padres el día de su boda. Recuerdo que eran felices, y recuerdo a mi abuelo deseándoles un dichoso futuro. Eso decía la grabación que encontré.

Ahora yo vivo en ese futuro, y muchos de los que conocí ya no están.

No tardamos más de cien años en salir al espacio, y empezar a colonizar otros lugares. No encontramos a nadie, pero no nos sentimos solos. El mundo entero animaba cada descubrimiento, cada logro, cada nueva colonia.

Luego, dejamos de estar solos, dejamos de tener futuro.

 

Informe AL/656: Procesos de descontaminación en la planta de Parnedosa III.

Hemos constatado la presencia de galanita en el yacimiento siete. La extracción del mismo se hará al final del mes en curso. El centro de mando del sector revisará el montaje de la grúa, y supervisará la extracción. Cuando haya finalizado su extracción, regresaremos a la zona de seguridad, y volaremos el yacimiento. Luego, los correctores permanecerán en el yacimiento hasta certificar el nulo impacto ambiental.

La zona deberá ser descontaminada de toda radiación. Es recomendable el uso del topo-comedor, implantándolo a ochenta metros de profundidad, realizará una estimación de forma automática, desplegará sus paneles y absorberá los isótopos causantes de dicha confluencia.

El transporte se ha fijado para los trece días siguientes de la voladura. Las unidades de apoyo acompañarán a los transportes durante su regreso a la estación de procesamiento más próxima.

Posteriormente el transporte hasta Ridha se efectuará en dos partes: El primer trayecto hasta la estación exterior de Parnedosa III, y el segundo trayecto desde éste punto hasta el control de recepcionamiento de Ridha. Una vez que la carga esté fijada en sus contenedores, éstos se enterrarán a una profundidad no menor de 5 kilómetros, ni mayor de 20. Los accesos a dichas instalaciones se harán sólo por personal autorizado. Cualquier persona que entrara en estas instalaciones sin el registro adecuado será ejecutada inmediatamente.

Sobre este punto debemos reseñar la muerte de cinco civiles y dos ingenieros, en Parnedosa II. La ejecución se llevó a cabo después de comprobar su estancia en planetas ajenos, y su regreso de forma clandestina. Al ser interrogados por su procedencia, respondieron que no tenían nada que ver con la desaparición de la colonia en Alfa Nagrovna, ni con la clausura de Parnedosa I. Se les preguntó también por la información de la que disponían acerca de algunas colonias de protegidos, pero sólo se obtuvieron negativas. Tras varias horas de interrogatorio, se decretó su ejecución inmediata sobre el campo de extracción más próximo, siendo sus restos volatilizados durante la limpieza de los topos.

Anexa a esta declaración, se adjunta una grabación de un vigilante, testigo de dicho interrogatorio. En esta se conservan los últimos comentarios de uno de los detenidos; un civil, que aseguraba traer un mensaje para nosotros, desde otro mundo, uno que decía hallarse en disposición de ofrecernos algo que podría ayudar a nuestra supervivencia. No está escrito en ninguna lengua que conozcamos. Transcribo la declaración de dicho civil a nuestros caracteres, tal y como fueron recepcionadas por la grabadora personal del vigilante:

¡Tat yon vennérim! (Tengo vida para vosotros).

Éstas y otras consideraciones, incluida la transcripción, fueron tomadas en cuenta por nuestro órgano de gobierno de la primera colonia. Las conclusiones a las que se llegaron fueron: que no es posible considerar una alternativa a nuestra supervivencia de manos de un informante bajo sospecha; que la declaración del sujeto, producto de locura o enajenación, no podía ser verificada; y que nos es imposible conocer el mensaje, ya que su lengua nos es desconocida. Su estudio, se concluyó, requeriría demasiado tiempo.

Se decidió por unanimidad, preservar la sospecha y matarlos.

Informe elaborado por Walar G. Robina, asesor sobre Certificaciones de Aislamiento, en el sector de búsqueda 11.

Fecha 2357

 

Aquel ser volvió a tocar mi rostro e imitó mi sonrisa con su abertura bucal

—Ahora está con nosotros —escuché en un perfecto esperanto—. ¿Eso es todo?

—No hay nada más.

 


 

Amador Redondo MenudoAmador Redondo Menudo. Ha escrito, cree, desde siempre, ya fueran pensamientos, ideas, recuerdos o historias. Desde hace años, participa en todo tipo de talleres literarios, clubes de lectura, etc.
Se ha acostumbrado a incluir en el día a día el ejercicio de escribir, en una continua práctica de trabajo que, espera, le haga expresar, cada vez mejor, las ideas e historias que rondan su imaginación.

Leer otros relatos de este autor (en Almiar):
Una nueva vida | Calentura | Espléndida realidad | La rosa y el clavel

Contactar con el autor: amador.redondo [at] gmail.com

Ilustración relato: Fotografía por Ramón Salinero, en Unsplash [public domain].

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Revista Almiar · n.º 101 · noviembre-diciembre de 2018 · MARGEN CERO™

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