El mundo no empezó

______________________

por Alejandro Maciel

Es bien sabido que monsieur Descartes era francés. Y de los franceses, no podemos esperar otra cosa que debates, controversias y polémicas.

Monsieur Descartes, francés, opinaba que la voluntad de Dios no tiene límites y aún podría crear contradicciones ya que no está sujeta a la lógica aristotélica del Organon y los Primeros Analíticos. Pero esta idea se debe casi exclusivamente a la índole pugnaz de los pensadores galos que, con tal de fastidiar al Vaticano, no cejan en la manía de llenar las cátedras de pensadores inspirados en la nequicia más abyecta. ¿Podemos deducir del mundo tal cual lo vemos, su duración? ¿Bastará con el testimonio de los sentidos y un poco de razonamiento para saber si el mundo ha sido, dejará de ser o Es eternamente? Confieso que yo no podría hacerlo y conste que lo he intentado observando minuciosamente el árbol que tengo frente al balcón y aunque hice toda clase de análisis mentales no he conseguido pronosticar el día de su defunción ni adivinar cuándo dejó de ser semilla para nacer como brote. Cuando ya empiezo a desesperar sospechando que el tumor que me malogra el seso no me deja deducir lo evidente, llega en mi ayuda el P. Sertillanges advirtiéndome que la duración de las criaturas (el árbol, la piedra, yo mismo) y los fenómenos (la lluvia, la inercia de los cuerpos) depende de sus causas. Si la duración depende de las causas y si la única causa del mundo es la voluntad de Dios, que, nos recuerda el P. Sertillanges, «nunca cambia» entonces el mundo es eterno. Porque decir que no cambia es lo mismo que decir que nunca empezó ni tendrá fin, ya que ambas cosas implican cambios. Uno piensa en los sucesivos Apocalipsis que periódicamente difunde Hollywood, la CIA, los ambientalistas y los pastores electrónicos interpretando profecías de la Biblia y surge la duda: ¿Cómo sabe el P. Sertillanges que la voluntad de Dios es inmutable? Muy sencillo, recurriendo a la teología y la ontología en un recurso de mutuo amparo jurídico~filosófico nos recuerda que por definición Dios es: perfecto, infinito, indivisible, inmutable, la primera causa y el último fin del universo, el primer motor inmóvil que todo lo impulsa desde la eternidad. Si es inmutable no pude cambiar de parecer ni adoptar modas como hacen nuestros ministros de economía porque entonces la economía universal estaría sometida a los criterios de un lunático y eso es imposible para la lógica que predica un Dios perfecto. Y es aquí donde hinca con pravedad sus dientes monsieur Descartes, reprobado por réprobo para el P. Sertillanges, tomista consuetudinario.

¿Se sigue el razonamiento? Es muy simple una vez aceptadas las premisas. Si Dios no cambia, el mundo del que es Causa tampoco cambia y si no cambia es que nunca empezó ni tendrá fin. Los ciclos, vidas y muertes que vemos sucederse deben de ser una ilusión de los sentidos como ya lo presentían Parménides y especialmente los eleatas que lo siguieron: Zenón y Meliso. Eso es lo que yo llamo tener fe; creer en lo que no se ve contrariando lo que vemos a diario porque los ojos, ya lo sabemos, son los órganos más embusteros y falsarios que tenemos encima.


(De La salvación después de Noé;
Buenos Aires, Editorial Ocruxaves, 1989)




____________________
Alejandro Maciel, es Médico psiquiatra y escritor. Nació en Corrientes, Argentina, en 1956.

BLOG DEL AUTOR: El Blog de Alejandro Maciel (http://alebovino.blogspot.com/)

Lee otros textos de este autor (en Almiar): Cuentos de la abuelita Nicasia (relato) | Prolepsis del fraude (artículo) | Nota de un viejo proyecto de escritor a una señora periodista (entrevista) | Poemas publicados con motivo del IV Aniversario de la Revista Almiar.

ILUSTRACIÓN ARTÍCULO:

Dios (http://pdphoto.org/PictureDetail.php? mat=pdef&pg=5676) [public domain]; via Wikimedia Commons.


▫ Artículo publicado en Revista Almiar , n.º 38, febrero - marzo de 2008. Reeditado en junio de 2019.

Sugerencias

enlace aleatorio

Enlace aleatorio

Nicanor Parra

Vivir en un día feliz. Recuerdo por Nicanor Parra (artículo)


  • Créditos

    Revista Almiar (2008-2019)
    ISSN 1696-4807
    Miembro fundador de A.R.D.E.
  • Email

    Colaboraciones