poemas por
Felipe Fernández Sánchez

 

 

Sensualidad

 

I

 

Aún llevo grabado en memoria, la marca de su pecho en el costado,

tiempo atrás.

Mientras me decía algo que olvidé, y yo pecaba,

tiempo atrás…

Bajo una falda viva, pegada a la forma, que puede, sin querer, anonadarme. Mis ojos se

hacen Harpo y la persiguen, incluso no viéndola…

He de estudiar la manera de llenar la mano con su brazo.

He de planear la manera de rodearla, de abordarla.

He de intentar tener su piel.

He de trabajar la sensualidad.

 

II

 

Bailando con el aire que envuelve el tiempo, lanzo gemidos que deben envolverte y

calentarte hasta quemar la piel.

Toca mi mano hasta volverla pálida, no me mires, no puedo resistir tus ojos en los míos,

y yo quiero verte, yo quiero soñar que soy casto e impúdico, lujurioso y pacato.

Adiós, sé que eres musa, sé que no volverás.

 

Serious Problem

 

Percuto sobre las llamas en su punto más blanco.

Baila la rueca hasta la muerte.

En el fuego se queman instantes, con parsimonia inútil.

Sobre la retina el fulgor amarillo del sol.

Sobre los cristales del invierno, la escarcha del atardecer.

Serio, adusto, oculto el temor con la careta conspicua del hombre cabal.

Encubre el tufo hediondo de las entrañas podres, con un gesto reservado de la mayor

importancia.

Lamentos que no dicen nada.

I have a serious problem

You have a serious problem.

Y sueñas con el aliento  que te anule, que te borre hasta no dejar nada. El sueño de

vacuidad perfecta. El no yo, la nada acogida por el deseo de no ser.

Y paredes derrumban sus ladrillos sobre las cabezas de los hombres que creían en ellas.

Y el aliento de un beso borrará la memoria.

 

 We have a serious problem

 

I

Quedado  en mí, como un sello, irremisiblemente encadenado,

prendido en la piel como un broche, irremisiblemente tuyo.

 

II

Te recito porque formas parte de mis sueños. Todas las cosas. Toda la gente. Todo el

tiempo. Toda la vida. Todo lo que deseo. Toda la alegría. Todo el aire. Toda la brisa.

Toda la nieve. Todo el sol. Toda la luna. Todo el firmamento y las estrellas. Todo tu

amor.

Toda tú.

 

III

 

Pues al final, todo deseo de amar se diluye entre la piel,

en esa gota de sudor sobre la frente, sobre un labio,

después de hacer el amor.

 

Felipe Fernández SánchezFelipe Fernández Sánchez«Vine al mundo en Madrid mediado el siglo veinte, por azares del destino terminé trabajando en el mundo bibliotecario. Sin motivo aparente, soy de los que disfrutan leyendo: al poco tiempo, con una chispa de ingenio a lo que soy proclive, me percaté de que eso era lo mío, aún me acuerdo cuando descubrí Bartleby el escribiente de Hermann Melville cuando lo colocaba en su lugar.

Pasado el tiempo me dio por escribir, fruto de ello es el blog Inverosímil_felipe (http://inverosimilfelipe.blogspot.com.es/) en el que consigo comentarios amables de familiares y amigos. Item más, se me ocurrió lanzarme a Internet y han tenido a bien publicarme pequeños relatos en Sci-Fdi, Prosofagia, Planetas Prohibidos y Ariadna rc. quienes, además, publicaron un poema».

Contactar con el autor: fefersan[at]gmail.com

🖼️​ Ilustración poemas: Fire 01, By Kamranfarahi Kamran Farahi (Own work) [Public domain], via Wikimedia Commons.

 

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