relato por
Eva M.ª Medina Moreno

M

e estaba meando, necesitaba ir al servicio. Me escabullí por debajo de los asientos buscando el lavabo. Entonces descubrí que el que hacía de león se fumaba un cigarrillo con la princesa rusa, a la que echaba el humo a la cara y cogía por la cintura; princesa, algo barriobajera, que acababa de hacer acrobacias encima de los elefantes. La cabeza de león estaba en el suelo, al lado de ellos. Iba a preguntar cómo ir al servicio, pero antes de hacerlo oí un «quítate niño» de uno de los payasos que discutía con el presentador, quien a su vez estaba comiéndose un bocadillo de chorizo y se limpiaba la grasa en la capa negra brillante. Aquello fue peor que enterarme de que los reyes eran los padres, peor que si se hubiera descubierto que la bella durmiente se drogaba, que el hada madrina y el príncipe eran amantes, y que la madre de Bambi había fingido su muerte para librarse del hijo.

Todo el encanto del circo se desplomó; el hombre-bala, el domador de leones, los equilibristas, los payasos. Toda esa magia. Había algo obsceno en el descubrimiento. El mal olor de los animales, las cagadas de los elefantes, el chihuahua del domador ladrándome, el domador escupiendo, sin hacerme caso. «El servicio, por favor». Y la mirada diabólica del payaso triste. Me meé encima.

No quise volver al circo. Mi madre nunca supo el porqué. Creo que fue desde ese día que empecé a bucear en el mundo real, con maquillajes descoloridos, y sin las máscaras de la infancia. El mundo del circo estaba podrido, la vida estaba podrida. Era como pasar a otra dimensión, en una edad en que querías aferrarte a los sueños, en que confiabas en un mundo fantástico, aunque supieses que no existía.

Aquella tarde se me cayó la carpa encima, todavía no me la le quitado. Hoy voy con mis hijos al circo y rezo para que no les entren ganas de mear.

 

Eva María Medina MorenoEva María Medina Moreno. (Madrid, 1971). Licenciada en Filología Inglesa y Diplomada en Profesorado de Educación General Básica, por la Universidad Complutense de Madrid. Con el Título del Ciclo Superior en Inglés de la Escuela Oficial de Idiomas de Madrid, y The Certificate of Proficiency in English, por la Universidad de Cambridge. Tras el Período de Docencia del Doctorado en Filología Inglesa de la UNED, investiga en el campo de la Literatura Inglesa del siglo XX y Contemporánea, sobre la multiplicidad del yo en la obra de Virginia Woolf. Trabajo que compagina con la escritura de su primera novela. Ha realizado talleres de Relato y Novela. Ha asistido a Seminarios y Cursos de Literatura, y a Cursos sobre la obra de escritores, Luis Mateo Díez, Laura Restrepo, que los propios autores impartieron. Premiada en el I Certamen Literario Ciudad Galdós por su relato Tan frágil como una hormiga seca (publicado por la Editorial Iniciativa Bilenio S.L. 2010). Seleccionada en el V Premio Orola, en cuya antología publicaron su relato Mi bodega (Ediciones Orola S.L. 2011). Ha publicado Mi bodega y La ferocidad de una gota en la Revista Cultural Agitadoras (noviembre 2011). Los relatos Sombras y Parpadea se publicaron en la Revista Cultural Agitadoras de diciembre 2011. El relato Sombras también fue publicado en la Revista Literaria Al Otro Lado Del Espejo (Noviembre 2011).

 Contactar con la autora: relojesmuertos [at] gmail [dot] com
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🎪 Ilustración relato: Cirque de nuit, fotografía por Usher. Piers, CC BY-SA 4.0, via Wikimedia Commons

 

Biblioteca Aquella tarde de circo

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