Laureano Asoli

El loco de la Calle Vieytes

I

El loco de la calle Vieytes nadaba en su pileta,
Mientras una avispa bailaba en su panal,
Eran las tres de la tarde,
El cielo estaba azul,
El sol estaba tan fuerte
Que quemaba la espalda del loco de la calle Vieytes.

II


Eran las cuatro de la tarde,
El loco salió a caminar,
Una lluvia de mariposas se posó en su hombro,
Otra lluvia de golondrinas se posó en su cabeza,
Tal vez para tomar sol
Quizá para acariciarlo
O descansar un poco.

III


Eran las seis,
El loco volvió a su hogar,
Muerto de calor
Y cansado de tanto caminar
Por la costa,
Donde sus ojos se flecharon
Con la mirada de una muchachita,
Para descansar recurrió a la poesía:
Hipnotizaba su vista con versos de Artaud, Baudelaire, Borges, Eluard,
Neruda y Gelman.

IV


Eran las once,
El loco subió a su cuarto,
Se sacó la ropa,
Apagó la luz,
Se acurrucó en su cama,
Cerró sus ojos
Y a los pocos minutos ya estaba ahogado en un mar de sueños.

V


Eran las ocho menos cinco de la mañana,
El loco despertó contento,
Porque lo esperaba un nuevo día,
Largo,
Hermoso
Y luminoso.


_______________
es un joven autor residente en Rosario (Argentina). Sus versos cuentan con el poder de la sugerencia tomando como partida la descripción de lo estrictamente cotidiano.

Contactar con el autor: laureano1982 [at] hotmail.com


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